Es dificil explicar con pocas palabras y páginas un pensamiento completo y vario como lo del VVD.
Con aprosimación se puede decir que contrariamente al
pensamiento filosófico occidental, los principios del VVD no
tiene un fundamento teorico. Ellos nacen de una dimensión
prática, ética y moral.
Una dimensión que observa el hombre en dos perspectivas:
· la relación del hombre y sí mismo, y con los demás;
· la relación entre el hombre y el universo en que pertenece.
Se encuentran los conceptos de mundo y hombre en la filosofía
del VVD según el principio fundamental de la armonía, de la no
manipulación o del dominio.
El VVD mira a la formación del verdadero hombre, no solamente
del hombre fuerte y tiene fundamento en el principio del armonia
entre fuerza y flexibilidad.
Su emblema: Ser fuerte para se útil
Su expresión: Mano de acero y bontad del corazón
Su simbolo: El bambú.
El bambú es una planta que representa el imagen de la
rectitud, de la flexibilidad, de la perseverancia y del
desinterés material. El bambú es derecho y flexible y siempre
verde en todas las estaciones.
Praticar el VVD significa entrar en una grande comunidad mundial
donde la fraternidad de los hombres es fundamental y la amistad
vale más de los prejuicios de razas, políticos y religiosos.
Ser VVD Sinh - praticante VVD, significa ser consciente del
destino de la humanidad y ser capaz de tomarse las
respondabilidades frente a todo el mundo.
Significa además buscar constatemente el equilibrio en todas las
cosas.
El armonía es el alma del VVD, perseverancia y modestia son los
valores del praticante.
La magnitud del VVD es la de transformar el praticante en un amigo de los hombres, no en el enemigo más fuerte entre los emnemigos.
El valor de un arte marcial es su filosofía. El VVD tiene un
sistema filosófico estructurado y vario.
En el camino el praticante descubre la evolución técnica y la
profundidad del VVD. La filosofía del VVD es el alma milenaria
de la cultura vietnamita.